Al ser una de las propuestas bandera del ahora ex – precandidato democrático
A la presidencia de los Estados Unidos 2020 Andrew Yang,
Se ha puesto nuevamente sobre la mesa el tema UBI,
Pero ¿Sabes de Qué se trata? ¿Qué significa?
Será una solución para la pobreza.
Acompáñame…
UBI Es un acrónimo que por sus siglas en inglés es Universal Based Income, ingreso básico universal (UBI). Esta idea tiene sus inicios a principios del siglo XVI cuando Sir Thomas More lo describió en su utopía de una sociedad en la que cada persona recibe un ingreso garantizado. El 4 de octubre de 2013, activistas suizos de la Generación Grundeinkommen organizaron una actuación en Berna en la que aproximadamente 8 millones de monedas, una moneda que representa a una persona de la población de Suiza, fueron arrojadas a una plaza pública. Esto se realizó para celebrar la exitosa recolección de más de 125,000 firmas, lo que obligó al gobierno a celebrar un referéndum en 2016 sobre si incorporar o no el concepto de ingreso básico en la constitución federal. La medida no fue aprobada, con un 76.9% de votos en contra de cambiar la constitución federal para apoyar el ingreso básico.
Hoy en día, es un programa propuesto por futuristas y políticos progresistas que proporcionaría una asignación básica a todos los ciudadanos en la ciudad, estado o país y podría tener un gran impacto en su presupuesto.
En los Estados Unidos la asignación sería mensual en un monto aproximado de $1.000,00 US dólares que podrían ser usados a discrecionalidad de cada individuo. Sin embargo, este programa está siendo implementado en Alaska desde 1982 y es llamado como Dividendo de Fondo Permanente y le dan dinero a cada hombre, mujer y niño que allí vive; vale acotar que los residentes de este país dicen que prefieren que les suban los impuestos antes que les quiten este beneficio.
Actualmente, hay en el país Norte Americano 3 programas piloto llevados a cabo por empresas privadas dos en California en la ciudad de Oakland y en la ciudad de Stockton y otro en Chicago Illinois. Sus resultados aún no han sido evaluados ya que están en marcha.
Se han hecho programas piloto en otros países como Canadá donde no dio buenos resultados, terminado anticipadamente por falta de fondos y en Finlandia donde los resultados preliminares son positivos pero los resultados finales esperan se obtengan a finales de este año.
Tradicionalmente, UBI se enmarca en torno a dos objetivos diferentes:
1) Contrarrestar las posibles pérdidas de empleo por la automatización, incluidas las ocupaciones de riesgo como los conductores de camiones. Así como también la de cubrir puestos de trabajo que realicen esfuerzos físicos repetitivos en los niveles más básicos y de manufactura.
Este punto se ha convertido en tema de preocupación a nivel global. El desarrollo de la tecnología, la inteligencia artificial y su implementación han ido desplazando paulatinamente a la mano de obra básica. Se espera que en el 2030, 1/3 de los puestos de trabajo del mundo hayan sido desplazados por la automatización. Solo en los Estados Unidos se espera sea de un 40% de los puestos de trabajo desplazados para la misma fecha.
Personalidades como Elon Musk, Mark Zuckerberg, Richard Branson y Andrew Yang, todos emprendedores, millonarios y visionarios con sus empresas orientadas a la tecnología. Se han pronunciado al respecto mostrando su preocupación por este tema y hasta cierto punto apoyando la política del UBI públicamente en pro de contribuir a mejorar la calidad de vida de los trabajadores afectados por esta realidad.
Entonces, ¿Debemos preocuparnos nosotros también?
2) Actuar como un instrumento deliberado de reducción de la pobreza. Se espera que con este ingreso adicional la población en general disponga de recursos base que permita a nivel general tener un soporte mensual que lo aleje de la pobreza. Este ingreso igualitario para todos se espera les permita cubrir las necesidades más básicas de cada
familia.
A nivel individual dependerá de la necesidad de cada uno si usarán los fondos para suplirse de alimentos, ropa, vivienda, o quizás servicios básicos. De igual manera, el nivel de educación financiera influirá en la dirección y uso de dichos recursos. Pueden ser destinados al ahorro o a la inversión. Si el destino es este último, se podría pensar habría más liquidez en los mercados de valores.
Sin embargo, se presenta una disyuntiva de si el efecto será positivo o negativo para la economía de los países. Puesto, se cree podría crear inflación por el exceso de dinero circulando aumentando la demanda de bienes y servicios. Quizás en algún punto se presente una subida de precios por consecuente opacaría el fin principal del UBI porque no alcanzaría para cubrir los gastos básicos.
Además, los gobiernos deben estipular de qué manera se obtendrán los recursos o de donde se van a obtener. Así, como la viabilidad e implementación del programa. Hay preocupación por los resultados si lejos de mejorar la economía en general, la consecuencia sea la falta de estímulo para la búsqueda y obtención de empleos por parte de los beneficiarios. O quizás el gobierno simplemente no pueda sostener esa política por mucho tiempo a consecuencia produzca un aumento en el déficit fiscal.
Por ahora aún queda un largo camino antes de implementar estas medidas de auxilio económico a un nivel generalizado o Universal como lo dice el acrónimo. Mientras tanto con o sin asignación, lo cierto del caso es que debemos capacitarnos en el campo tecnológico, inteligencia artificial, informático, codificación, robótica y todo lo relacionado a este campo a fin de adquirir habilidades que nos conviertan en personas competitivas en la misma dirección que el mundo está tomando.
Haciéndonos así personas con poca facilidad de ser sustituidas por un robot o máquina y no convertirnos en una víctima más de la automatización.
Por ende, la invitación de hoy es EDUCATE y LIBERATE, solo así saldremos adelante